SICA - Central America Integration System

06/06/2022 | Press release | Distributed by Public on 06/06/2022 14:47

El PROGRESAN-SICA II mantiene alerta ante el aumento de los factores de riesgo de crisis alimentaria global



La prolongación del conflicto entre Rusia y Ucrania iniciado a finales de febrero de 2022 está afectando el sistema agroalimentario global que ya sufría las consecuencias de las medidas sanitarias adoptadas para enfrentar la pandemia del COVID-19, así como también del cambio climático y un shock de precios de productos energéticos. En este contexto, las Naciones Unidas advirtió el 18 de mayo pasado que en los próximos meses de 2022 se cierne la amenaza de una escasez mundial de alimentos que podría durar años y que, de alargarse el conflicto entre Rusia y Ucrania y reducirse los suministros alimenticios de ambos países, millones de personas podrían caer en pobreza y hambre.

Por su parte, el Director Ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos (PMA), David Beasley advirtió a los líderes mundiales en reunión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas celebrada el 19 de mayo de 2022, que nos enfrentamos "a una tormenta sin precedentes, una tormenta perfecta por los conflictos, la crisis climática y el COVID-19". También indicó que, antes del inicio de la pandemia, el número de personas que se encaminaban a condiciones de inanición crecieron de 80 a 135 millones; después, con la epidemia de COVID-19, pasó de 135 a 276 millones; y con la crisis en Ucrania, se elevará la cifra a 323 millones "como mínimo".

La reacción desfavorable de algunos países ante las alzas de los precios internacionales de los alimentos ha contribuido a empeorar la situación; desde que comenzó el conflicto en Ucrania, 23 países adoptaron importantes restricciones a las exportaciones de alimentos, que representan el 10% de las calorías que se intercambian a nivel mundial. Adicionalmente, se estima que más de una quinta parte de las exportaciones de fertilizantes también están sometidas a nuevas regulaciones que las restringen.

El sistema agroalimentario mundial se ha visto afectado por las alzas de los precios de los productos energéticos, que según el Banco Mundial están sufriendo el mayor incremento de precios desde la crisis del petróleo de 1973. En mayo de 2022, el precio internacional del petróleo de referencia para la región del SICA (el WTI) subió hasta los US$ 109.6 el barril de crudo, creciendo 7.7% respecto a abril. Con el incremento de mayo se retorna a la tendencia manifiestamente alcista registrada en los tres primeros meses de 2022 y solo interrumpida, temporalmente, en abril. El precio promedio mensual del crudo de mayo de 2022 es mayor en 68.1% respecto a mayo de 2021 y es el precio promedio mensual más alto registrado desde abril de 2011.

El incremento en los precios de los productos energéticos, particularmente, el petróleo, ha contribuido a las fuertes alzas en los precios de los fertilizantes experimentados desde 2021, tendencia que fue intensificada por el conflicto en Ucrania. En mayo del año pasado los precios internacionales de los fertilizantes experimentaron un crecimiento anual significativo de 57.3%, pero en mayo de 2022 los precios se escalaron en 110.3%, a raíz de las alzas en los precios de los energéticos y por las restricciones a las exportaciones de fertilizantes adoptadas por Rusia, lo cual está poniendo en riesgo la próxima cosecha mundial.

El Índice de Precios de los Alimentos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) a mayo de 2022 se redujo en 0.6%, registrando la segunda baja mensual consecutiva en 2022 (-0.9% en abril); ambas disminuciones son relativamente menores y no compensan el alza histórica producida en marzo de 2022 (13.2%), que llevó a los niveles de precios más altos observados desde 1990. No obstante que se ha atenuado la tendencia alcista de los precios de los alimentos, en mayo de 2022 se mantienen 20.8% más altos que los del mismo mes del año pasado. De acuerdo a cifras del Banco Mundial, el precio promedio internacional de la tonelada métrica de trigo en mayo de 2022 ascendió a US$ 522.3, subiendo 75.7% respecto a mayo del año pasado. En lo que se refiere al precio promedio internacional del maíz amarillo, la tonelada métrica llegó a los US$ 344.8 en mayo de 2022, lo que significa un aumento de 12.9% respecto mayo del año pasado.

El contexto internacional incidió en que la tasa de inflación promedio de la región del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) pasara de 3.5% en abril de 2021 a 6.4% el mismo mes del año en curso. La dinámica creciente de los precios de los alimentos y el transporte (que incluye precios de combustibles) es lo que ha producido alzas de la inflación en la región. El promedio regional de inflación de alimentos prácticamente se triplicó entre abril de 2021 y abril de 2022, pasando de 3.4% a 10.1%, respectivamente.

En el contexto global actual se están conjugando fenómenos que ponen en alto riesgo la Seguridad Alimentaria y Nutricional (SAN) de las poblaciones más pobres y que representan una señal de alerta para los países de la región del SICA y la cooperación internacional, que deben prepararse para mantener las medidas de política pública de apoyo a los más vulnerables y asegurar su sostenibilidad en el marco de una gestión prudente de las finanzas públicas para no arriesgar la estabilidad macroeconómica.

Los gobiernos de los países del SICA han tomado diferentes medidas de carácter excepcional y temporal para mitigar el impacto de la inflación en el gasto de los consumidores y, particularmente, para proteger el poder adquisitivo de los hogares más pobres. Entre las medidas adoptadas están la asignación de subsidios y suspensión de algunos de los impuestos que se incluyen en los precios a los combustibles; entrega de subsidios para el consumo de gas y electricidad; reducciones arancelarias a la importación de ciertos alimentos básicos; entrega de paquetes de semilla, fertilizantes e insumos para pequeños agricultores; inspección de precios para controlar la especulación; ampliación de los programas de reservas estratégicas de granos básicos, entre otras.

Es importante hacer mención que los programas de subsidios, la reducción de aranceles y otras medidas no deberían verse como soluciones permanentes, ya que representan erogaciones que deben ser sostenibles presupuestariamente. Sería preferible adoptar políticas para fortalecer la producción local para bajar la dependencia de las importaciones, así como también impulsar campañas dirigidas al consumo de alternativas alimentarias nutritivas.

Ante toda esta situación, el Programa de Sistemas de Información para la Resiliencia en Seguridad Alimentaria y Nutricional de la Región del SICA segunda fase (PROGRESAN-SICA II) pone a disposición el tercer Boletín de Monitoreo de Precios de Alimentos (mayo 2022), el cual responde al mandato de la Reunión de Presidentes del SICA para disponer de un mecanismo de monitoreo de incrementos significativos de precios de alimentos básicos. Ese mecanismo se activa para la generación de alertas en contextos de crisis económicas, ambientales y políticas, que tienen el potencial de afectar la SAN de las poblaciones en condiciones socioeconómicas vulnerables.

Para conocer más detalles puede consultar el Boletín completo en el siguiente vínculo: "Boletín de Monitoreo de Precios de Alimentos. Mayo 2022"

El PROGRESAN-SICA II es un programa de la Secretaría General del Sistema de la Integración Centroamericana (SG-SICA) con financiamiento de la Unión Europea. Cuenta con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), y la Iniciativa Global de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF), entre otras.

Centroamérica, 6 de junio de 2022